Buñuelos de viento.

¡Hola cocinillas!

Hoy vamos a preparar buñuelos de viento una receta dulce, típica de Semana Santa y también del Día de Todos los Santos , que es muy sencilla y muy versatil ya que puedes rellenarlos o acompañarlos del sabor que más te guste. A mi me encanta el buñuelo sin más por eso he decidido quedarme con la versión sin relleno.

¡Allá vamos!

Ingredientes (20 buñuelos aprox.):

• 125 ml o 1/2 taza de leche
• 1/2 ramita de canela
• 2 peladuras de limón
• 1/2 cucharadita de esencia de vainilla
• 50 g de mantequilla sin sal
• 1/2 cucharadita de sal
• 100 g de azúcar
• 20 g de canela en polvo
• 75 g de harina de trigo
• 2 huevos tamaño L
• Aceite de girasol

Elaboración:

1. Infusionamos la leche con las peladuras de limón, la ramita de canela y la ensencia de vainilla. La dejamos en el fuego hasta que hierva y después colamos.

2. Volvemos a echar la leche en el cazo y le ponemos la mantequilla sin sal cortada en dados, 1/2 cucharadita de sal y una cucharada de postre de azúcar. Dejamos hervir y removemos hasta que la mantequilla esté totalmente disuelta. 

3. Entonces apagamos el fuego y añadimos de golpe la harina. Removemos hasta integrar bien todos los ingredientes y hasta que la masa se despegue de las paredes del cazo y dejamos que enfríe unos 15 minutos.

4. Batimos un huevo, se lo echamos a la masa de los buñuelos y mezclamos bien. Batimos un segundo huevo pero solo vamos a echarle lo que necesite la masa. El objetivo es conseguir el punto pico de pato, es decir una masa consistente pero que al elevar la cuchara consigamos esa forma de pico de la que hablamos. Así que le echaremos un poquito, mezclamos y si necesita más seguiremos y si ya tenemos la textura deseada vamos a por los buñuelos.

5. Los buñuelos pueden hacerse con dos cucharas como ha sido mi caso o con una maga pastelera y mojando ligeramente los dedos en aceite para que no se te pegue la masa.

6. Ponemos al fuego un cazo alto con abundante aceite de girasol. Cogemos un poquito de masa con una cuchara de postre y la pasamos a la otra cuchara para darle la forma redondeada .  Cuando el aceite esté bien caliente vamos echando las bolitas de masa que hacemos con las cucharas. Veremos como los buñuelos se inflan y se van dando la vuelta ellos solos, aunque a veces hay que ayudar a alguno. 
 

7. Cuando estén doraditos los sacamos a un bol que contenga el azucar mezclado con la canela y los envolvemos bien. Dejamos que templen un poquito y ...

¡Listos para comer!

 

En este caso he decidido hacer los buñuelos de viento sin relleno pero admiten nata, crema, chocolate, el sabor que más os guste. O simplemente un poco de confitura... ¡¡delicioso!!